El Secretario General de las Naciones Unidas, António Guterres, asegura que durante la pandemia, «el calentamiento de nuestro planeta no se ha detenido» e invita a todos los líderes a elegir el camino de la energía limpia.
«La acción climática es la única manera de asegurar un planeta habitable para esta generación y las futuras». Así pues, el Secretario General de las Naciones Unidas, António Guterres, en una conferencia de prensa celebrada ayer para la presentación del informe United in Science 2020 (preparado en colaboración con la Organización Meteorológica Mundial), quiso reiterar cómo, durante la pandemia, «el calentamiento de nuestro planeta no se ha detenido».
La concentración de gases de efecto invernadero alcanzó nuevos máximos históricos en 2020″. Para el diplomático portugués «tanto si nos enfrentamos a una pandemia como a una crisis climática, está claro que necesitamos ciencia, solidaridad y soluciones decisivas».
Las propias políticas elegidas y adoptadas para la recuperación económica – reiteró el Secretario General de las Naciones Unidas – deben estar dirigidas de tal manera que permitan «una verdadera oportunidad de poner al mundo en una senda sostenible», necesaria para lograr el objetivo de limitar el aumento de las temperaturas en este siglo a 1,5 grados centígrados.
Sin embargo, Guterres, al destacar una desaceleración tanto de las economías como de los gases de efecto invernadero debido al coronavirus, quiso subrayar que el expediente certifica que «los cierres a corto plazo no son un sustituto de la acción climática que necesitamos para alcanzar los objetivos del acuerdo de París».
Por ello, el número uno de las Naciones Unidas ha invitado a todos los líderes a elegir el camino de la energía limpia, insistiendo en que «los fondos públicos deben utilizarse para invertir en el futuro, no en el pasado, e ir a sectores y proyectos que ayuden al medio ambiente y al clima».
Luego está la referencia a los subsidios a los combustibles fósiles que «deben terminar, los contaminadores deben pagar por su contaminación y no deben construirse nuevas centrales eléctricas de carbón». Un negocio que, según él, «se está desvaneciendo» y para el que no hay más espacio en los planes de recuperación económica post-pandémica.