El Cardenal Antonio Cañizares, Arzobispo de Valencia (España) envió una carta en relación a la “emergencia educativa provocada por la nueva ley orgánica sobre educación, aprobada por el Congreso de Diputados» y ante la que animó a los padres a defender sus derechos y a unirse a asociaciones para protestar «como una sola voz».
Ante “el gran movimiento de respuestas y rechazo que está suscitando esta ley en diversos sectores de la sociedad y en la opinión pública”, el Arzobispo de Valencia explicó que “la educación es una realidad en la que todos estamos implicados y que a todos afecta, como afecta al futuro de los hombres, de la sociedad, y de las familias”.
Por eso, animó a informarse bien de esta Ley y sus consecuencias y pidió actuar responsablemente ante esta Ley porque, según subrayó “depende mucho, muchísimo, el futuro de los hijos y de la sociedad”, y aseguró que “hay muchas maneras de ejercer los derechos a la educación y en la educación que no quedan bien parados en esta legislación que podemos y debemos impedir”.
También alentó a ejercer los derechos de los padres y ponerlos en práctica exigiéndolos a quienes deben cumplirlos en un Estado democrático. “ Estos derechos vuestros se defienden mejor asociadamente, y por eso pido que se unan también las asociaciones en torno a la enseñanza que, en estos momentos y siempre, han de actuar unidas, como una sola voz, un solo clamor, una única exigencia que es común a todos y por el bien común”, subrayó.
“No podemos callar ni quedarnos parados. Exijamos que se cumpla en toda su amplitud el artículo 27 de la Constitución que tanto costó en el momento de su redacción, pero que tan bien quedó al final con el acuerdo de todos”.
El Cardenal Cañizares también instó a “defender y proteger la educación, la educación en libertad, la libertad de enseñanza, la libertad de los padres a elegir la educación que queréis para vuestros hijos conforme a vuestras convicciones morales y religiosa”, entre lo que incluyó el cuidado de la enseñanza de Religión “tan injustamente” denostada.
De esta manera el Arzobispo de Valencia animó a movilizarse y a seguir adelante “sin bajar la guardia y con mucha esperanza”.