Ungidos con el santo oleo
«Venid a mí todos los que estáis cansados y agobiados, y yo os aliviaré» con la cita bíblica del evangelio de san mateo (cap. 11, 28). La iglesia católica celebra la Eucaristía en honor a una de las Advocaciones más veneradas de la Virgen María y que para muchos en la fuente del descanso en la enfermedad la Virgen de Lourdes
Abandonados en esta confianza, hoy feligreses de la diócesis acudieron a la catedral de Comayagua, a recibir la fuerza y el ánimo que da en medio de la prueba el sacramento de la unción de los enfermos al ser ungidos con el óleo santo
Este sacramento es administrado por el obispo o el sacerdote, unge con aceite consagrado en la frente y en las palmas de las manos, pronunciando a su vez las palabras: “Por esta santa unción, y por su bondadosa misericordia, te ayude el Señor con la gracia del Espíritu Santo, para que, libre de tus pecados, te conceda la salvación y te conforte en tu enfermedad
La Unción de los Enfermos es una preparación para el paso de esta vida a la gloria eterna y son muchos los efectos y gracias que confiere al enfermo. Pero no solo los que tienen las dolencias propias de un cuerpo débil, es un viático para dar paz al alma que se siente atormentada.
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