Tras anunciar el 15 de diciembre que su Arzobispo, Mons. Francisco Moreno Barrón, dio positivo a coronavirus COVID-19, la Arquidiócesis de Tijuana anunció recientemente que la salud del Prelado está mejorando.
En un comunicado publicado el 21 de diciembre, la Arquidiócesis mexicana agradeció las “valiosas oraciones” por la salud de Mons. Moreno Barrón, y subrayó que el Arzobispo, “superadas algunas complicaciones inesperadas, va respondiendo muy bien a su convalecencia por la doble operación de próstata, así como a su tratamiento por el Covid-19”.
“Por indicaciones médicas”, añadió, el Arzobispo de Tijuana “continuará confinado en su habitación y en reposo por el tiempo que se considere necesario, para su completa recuperación”.
“A él y a todos nuestros hermanos enfermos, los seguimos confiando en las manos amorosas de nuestro Padre Dios y en el regazo de la Virgen de Guadalupe”, concluyó la Arquidiócesis.
Con Mons. Moreno Barrón suman más de diez obispos mexicanos afectados por la pandemia, de los cuales al menos siete se recuperaron o tienen un progreso favorable.
A causa de la pandemia han fallecido cuatro prelados en México: el Obispo de Aguascalientes, Mons. José María de la Torre Martín; el Obispo Emérito de Autlánel, Gonzalo Galván Castillo; el Obispo Emérito de Culiacán, Mons. Benjamín Jiménez Hernández; y el Obispo Emérito de Tehuantepec, Mons. Arturo Lona Reyes.