En conferencia de prensa, el Consejo Nacional Anticorrupción (CNA), presentó un informe denominado “Concentración de Poder”, donde describieron la forma en que, muchos cargos del gobierno son otorgados con los mismos vicios del pasado, nepotismo y clientelismo político.

Según el informe, la concentración del poder y el otorgamiento de cargos a familiares y amistades, se puede observar en el Poder Ejecutivo, el Congreso Nacional y la Corte Suprema de Justicia (CSJ).

El Estado de Honduras está encaminado a repetir la misma historia del pasado, la cual lesionó los intereses de la ciudadanía, ya que aquellas prácticas que se criticaron con tanto ímpetu están siendo trasladadas para el funcionamiento de la nueva administración.

Lo que en el pasado fue objeto de crítica, hoy forma parte de la nueva filosofía, visto que, en el término de un año y cuatro meses, no han cumplido lo que prometieron. aún se encuentran vigentes los decretos de impunidad, aún continúan colocando en puestos del Gobierno a familiares y a personas que no cumplen con los requisitos exigidos por ley, como el caso del actual procurador y subprocurador del Estado.

Además, se siguen aprobando leyes para beneficiar a los corruptos como el caso de la amnistía otorgada a Enrique Flores Lanza, quien también ha sido premiado por el oficialismo al denominarlo asesor presidencial.

En suma, el nepotismo que ha surgido con la instauración del nuevo Gobierno ha dado el espacio para visualizar la inminente concentración de poder que está operando en el gobierno actual de la Presidenta Xiomara Castro, pues los puestos estratégicos y de los que se requiere un contrapeso están dirigidos por miembros de la misma estructura política y por miembros de su misma familia.

Lo anterior, acapara institucional por una minoría, puesto que los tres Poderes del Estado y demás instituciones están alineadas a la misma idea de pensamiento del Poder Ejecutivo, lo cual evidencia la inexistencia de un sistema de no subordinación.

La concentración de poder representa el quebrantamiento de la división de poderes, en virtud de la ocurrencia de este fenómeno, el imperio de la ley y la protección de los derechos y libertades fundamentales de los ciudadanos no pueden ser garantizados por el Estado, describió el CNA.

Amplían que, durante el gobierno del expresidente, Juan Hernández, los poderes del Estado y demás órganos públicos se encontraban subordinados al Poder Ejecutivo.

El nepotismo, indican que, es una dificultad para cumplir objetivamente los fines del Estado y condiciona el accionar de los funcionarios públicos, desde el CNA se hace un fuerte llamado al Poder Legislativo para regular normativamente estas conductas y que con ello se castigue y disuada el nepotismo.

CCJ NOTICIAS