Tegucigalpa – “La mayor parte del Presupuesto General está comprometido, este presupuesto ya tiene dueño, en el sentido que la mayor parte del dinero es para el pago de sueldos y salarios, el servicio de la deuda, y por lo tanto el margen de reasignación es verdaderamente pequeño”, dijo este miércoles el coordinador general del Foro Social de Deuda Externa y Desarrollo de Honduras (Fosdeh), Mauricio Díaz Burdett, en torno al Presupuesto General de la República para el 2023 que asciende a 392 mil millones de lempiras.

Dijo que para que el Estado funcione se debe mejorar la recaudación tributaria, dejar de regalar dinero a sectores que no son prioritarios y seguramente habrá mayor endeudamiento público.

Díaz Burdett citó que la inflación en Honduras ya alcanza los dos dígitos.

Sobre la ejecución del presupuesto, recomendó mejorar la asignación de los recursos a las secretarías del Estado.

“La canasta básica con la que se mide la inflación es demasiado grande, hay 282 productos y servicios, entre los cuales hay viajes al exterior, lo referente a joyerías, perfumería y hoteles. Si uno hace una valoración de la verdadera canasta básica de la mayor parte de la población que podrían ser: frijoles, tortillas, arroz, verduras, algo de carne, comunicaciones, transporte, nos vamos a encontrar que la cifra puede ser el doble de lo que en este momento se puede tipificar para 282 bienes”, explicó.

Mencionó que la mayor parte de la población hondureña no tiene los suficientes ingresos, es decir que las mayorías la están pasando muy mal y por lo tanto el efecto inflacionario está repercutiendo en la calidad de vida, educación y salud.

Lo anterior provoca que se incremente la cantidad de hondureños que todos los días migran hacia Estados Unidos y otros países como España, México e Italia. “Esto se traduce en una descapitalización del producto más importante que tiene el país que es su gente”, apostilló. 

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