La constante preocupación del Papa y su cercanía al país africano que ve empeorar la situación humanitaria en la provincia norteña de Cabo Delgado.
El obispo de Pemba en Mozambique, Monseñor Fernando Lisboa, cuenta a Vatican News la inesperada llamada telefónica que recibió del Papa Francisco el miércoles por la mañana. La voz del prelado es una de las que constantemente llama la atención sobre el empeoramiento de la situación humanitaria en la provincia septentrional del país africano, en Cabo Delgado, donde desde 2010 se han descubierto importantes reservas de gas frente a la costa. La zona alberga el mayor yacimiento de gas natural líquido de África, que atrae enormes inversiones para su posible extracción. Ahora los crecientes y continuos levantamientos están poniendo en peligro la inversión.
El Papa sigue con gran preocupación los acontecimientos en la región
«Recibí una llamada del Papa que me dio mucho consuelo y tranquilidad. En la llamada, el Papa expresó su cercanía al obispo (de Pemba) y a la gente de la región de Cabo Delgado. El Santo Padre dijo que sigue los acontecimientos de nuestra provincia con gran preocupación y que reza constantemente por nosotros. También me dijo que, si hay algo más que pueda hacer, no debemos dudar en preguntarle. Está listo para caminar con nosotros. Le expresé mi profundo agradecimiento por el gesto de la llamada telefónica y le dije lo agradecidos que estamos cuando el domingo de Pascua, 12 de abril, rezó por Cabo Delgado durante la bendición Urbi et Orbi. Le dije que su referencia a la crisis humanitaria en nuestra provincia hizo que otras personas se enteraran de nuestra situación. Vemos que varias congregaciones, algunas organizaciones (humanitarias), muchas personas – tanto locales como de fuera – están empezando a colaborar. Le dije: ‘Santo Padre, ha puesto a Cabo Delgado en el mapa del mundo'». Él – dijo el obispo de Pemba – simplemente comentó en italiano: «¡Qué hermoso! ¡Qué hermoso!»
El ataque yihadista en la ciudad portuaria de Mocimboa da Praia
El obispo Fernando Lisboa también dijo que había informado al Papa Francisco de la situación en la ciudad portuaria de Mocimboa da Praia, que ha sido ocupada por militantes yihadistas que se dice están vinculados al Estado Islámico (ISIS). Según los informes, las fuerzas del gobierno abandonaron la ciudad estratégica después de que los yihadistas la atacaran la semana pasada. ISIS ha emitido una declaración en la que afirma haber secuestrado a Mocimboa da Praia, aunque algunos observadores de la región indican la participación de militantes somalíes de Al Shabab. De hecho, no está del todo claro quién está detrás de los ataques en Cabo Delgado.
No hay noticias de dos monjas desde hace más de una semana
«Le conté al Santo Padre – continúa Monseñor Fernando Lisboa – sobre la ciudad portuaria de Mocimboa da Praia, que fue tomada por los yihadistas, y cómo no tenemos más noticias de dos de nuestras monjas en esa ciudad. Son dos hermanas de la Congregación Internacional de las Hermanas de San José de Chambéry». En la reacción del Papa, el obispo subrayó la profunda tristeza y la promesa de rezar por ellos.
¡Adelante!
Volviendo de nuevo al contenido de la llamada telefónica con el Papa, el obispo añadió que, al final, Francisco recordó su visita a Mozambique hace un año y lo difícil que era ya entonces la situación en Cabo Delgado. «Me animó -añadió el obispo- a contactar con el cardenal Michael Czerny, del Dicasterio para la Promoción del Desarrollo Humano Integral de la Santa Sede, para que me ayudara en el frente de la asistencia humanitaria. Por mi parte – continúa el obispo – le aseguré al Santo Padre, a través de la oración, nuestra cercanía a su ministerio. Le dije que rezamos por él todos los días». «¡Adelante!», este fue el estímulo en español con el que el Papa concluyó la conversación. «Adelante, entonces, y mantén la fe firme.»
Los disturbios en Cabo Delgado
Desde 2017, la provincia septentrional de Mozambique se ha visto sacudida por ataques mortales perpetrados por grupos armados cuyas operaciones son cada vez más sofisticadas y constituyen una fuente de preocupación para los Estados vecinos, en particular Tanzania. Los ataques en Cabo Delgado han creado un clima de temor en toda la región, causando víctimas y miles de personas desplazadas. Pero incluso antes de que se descubrieran las reservas de gas y de la presencia yihadista, Cabo Delgado ya experimentaba dificultades extremas debido al alto nivel de pobreza y exclusión social.
El gobierno culpa a las élites internas y externas por el conflicto…
Ya en su discurso del 25 de junio de 2020, al comienzo de las manifestaciones por el 45º aniversario de la independencia nacional, el Presidente de Mozambique, Filipe Nyusi, culpó de la insurgencia en la provincia septentrional a lo que llamó «élites internas y externas», prometiendo que el país no sería chantajeado en una guerra mortal por terroristas patrocinados.
El obispo de Pemba recibió amenazas de muerte
Por su parte, el obispo de Pemba levantó varias veces su voz con valentía en nombre de la pobre gente de Cabo Delgado. También dijo en el pasado que el gobierno podía hacer más para proteger a la gente. Y precisamente para ser la voz de los sin voz, el prelado de origen brasileño ha recibido críticas e incluso amenazas de muerte de muchos sectores.