El hermano Nery Benítez, relata que su deseo de poder ser parte de una jornada de oración que se realizaría en el municipio de siguatepeque fue puesto a prueba al sentir un malestar estomacal que le afecto durante su recorrido hacia el lugar donde estaría el hermano Godofredo  Rodríguez Fernández, pero confiando en Dios pudo llegar al lugar del encuentro espiritual y sintió su alivio cuando fue abrazado por el misionero

En su relato  el hermano Nery, nos comparte que una deuda económica, también era motivo de preocupación, esto porque no contaba con los recursos necesarios para poder cubrir sus compromisos, pero a través de las oraciones y petición Dios tomo el control de la situación y se autorizó un préstamo que le permite solventar su crisis