Tegucigalpa – El aumento de pacientes hospitalizados por COVID-19 es una responsabilidad compartida entre la sociedad y las autoridades hondureñas, indicó el médico intensivista Hugo Fiallos.
“Esto no debe sorprendernos, esto es la factura que nos está pasando por los excesos que la sociedad ha sido sometida desde noviembre”, expresó el galeno.
Fiallos explicó que desde que el número de casos positivos iniciaron a disminuir en noviembre de 2021, se generó un espejismo en el país por el cierre de triajes y despido de personal de primera línea.
La población no prestó atención, cerró los ojos, volteó a ver para otro lado y creyó que ya había terminado, puntualizó.
Subrayó que la ciudadanía tiene parte de la responsabilidad por no cuidarse y no respetar las normas de bioseguridad, mientras que las autoridades por haber bajado la guardia creyendo que había terminado.
No obstante, resaltó que la cantidad de personas hospitalizadas es baja con las que están en las unidades de cuidados intensivos.
Sin embargo, el médico intensivista, advirtió que si un hondureño está vacunado no significa que no se va a contagiar o infectar a alguien.
Reiteró que el objetivo de la vacuna es disminuir la intensidad de la enfermedad.
Fiallos mencionó que la variante ómicron provoca una inhabilitación para que las personas asistan a sus jornadas laborales.
CCJ NOTICIAS