Durante enero y los primeros días de febrero, 58 menores han ingresado a la Fundación Hondureña para el Niño Quemado (Fundaniquem), con escaldaduras, es decir, lesiones causadas en la piel por el contacto con diferentes líquidos calientes.

Del total de atenciones, unos 51 pequeños ingresaron a las salas de hospitalización afectados por escaldaduras, en su mayoría, y otros siete fueron atendidos de manera ambulatoria.

Unos 46 pacientes se refirieron desde otros centros hospitalarios del país y el resto llegó directamente a Fundaniquem.

El departamento que más casos reporta es Francisco Morazán, con el 46 por ciento, seguido de Olancho con el 15 por ciento, mientras que el 39 por ciento restante se distribuye en 16 departamentos de Honduras.

La negligencia y el descuido de las familias está entre las principales causas por las que estos menores les toca llevar una cicatriz en su piel y una afección psicológica por el resto de su vida.

Quemaduras por líquidos calientes, flama, pólvora, electricidad, químicos y contacto con objetos calientes son las principales causas por las que los infantes resultan con lesiones.

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